La historia arranca en Granada, salta a Nueva York (Manhattan), hace una breve pero fundamental parada en Canadá y, al final, regresa a la tierra de partida. El hilo conductor acaba tejiendo un tapiz de poesía, surrealismo, canción, flamenco y rock. A la contra. Hace 15 años se publicaba uno de los discos imprescindibles de la música popular del país: OMEGA. La colaboración, en principio inesperada y con pinta de incoherente (error producto del prejuicio), entre Enrique Morente y Lagartija Nick. El flamenco se hermanaba con el rock de una manera diferente a como se había venido haciendo hasta entonces. Flamenco puro con base de rock tirando a metal. La voz del genio disparada a lomos de la contundente y precisa base rítmica del grupo. La guitarra flamenca jugando con la eléctrica saturada. El encuentro de dos figuras imprescindibles de la cultura, Lorca y Morente, reunidas tras pasar por el filtro de ese otro genio de la letra y la canción: Leonard Cohen. Con el tiempo, todos nos hicimos fans del resultado. Aunque fuese pasados los años. Suele pasar con las obras rompedoras. Van sumando adeptos con los años, una vez superados los temores iniciales generados por lo no habitual, llegando a lo sublime.
Primero conquistaremos Manhattan / First we take Manhattan
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